Ya sea hacer un trekking por una cadena montañosa, practicar escalada o psicobloc, vuelos en paramotor, rutas a caballo, senderismo o cicloturismo por imponentes acantilados, rutas en kayac, espeleología o birdwatching…las posibilidades de turismo activo en Baleares son infinitas y los límites los pondréis vosotros. 

Además, las condiciones para disfrutar de vuestra actividad favorita al aire libre son idóneas todo el año. Las Islas Baleares tienen un clima suave, con temperaturas templadas también en invierno y más de 300 días de sol al año, lo que las convierte en el escenario ideal para practicar actividades al aire libre fuera de los meses en los que hace más calor. 

De hecho, no son pocos los caminantes o amantes del mountain bike que se marcan como objetivo completar las rutas que ofrecen nuestras islas para descubrir, poco a poco, la increíble variedad y riquezade sus paisajes, rincones secretos y calas escondidas. 

Además de explorar las pequeñas islas deshabitadas que rodean nuestro archipiélago, como el Parque Nacional de Cabrera, las Islas Baleares cuentan con una amplia red de itinerarios bien indicados, como el Camí de Cavalls (GR 223) en Menorca, la Ruta de la Pedra en Sec (GR 221) o la Ruta de Artà a Lluc (GR 222) en Mallorca, la poco conocida ruta de Ses Torres den Lluc en Ibiza o el Pla de la Mola, en Formentera. 

Podréis surcar los cielos y admirar nuestras islas desde un punto de vista privilegiado con paseos en paramotor o en globo aerostático, observar en silencio la elegancia de los flamencos a su paso por nuestras islas con rutas de birdwatching o descubrir las entrañas de nuestras islas explorando las cuevas terrestres más espectaculares.  

Y de la tierra, nos caemos al mar: Mallorca está considerada el paraíso del psicobloc. De hecho, fue aquí donde nació esta modalidad de escalada, y atrae cada año a centenares de escaladores de todos los puntos del globo para practicarla. Aunque si no os convence caer al mar, siempre podréis surcarlo con itinerarios en kayak, con los que podréis explorar desde muy cerca las grutas que ha ido abriendo el mar en los muros de piedra que separan la tierra del mar o calas inaccesibles. 

Cualquier excusa es buena para escaparse a las Islas Baleares. Y lejos, lo que se dice lejos, no estamos. ¡Romped con vuestra rutina y reconectad con la naturaleza en nuestras islas!