Los atractivos de Menorca van mucho más allá de las calas vírgenes de aguas cristalinas. A pesar de su reducido tamaño, la isla atesora una gran variedad de paisajes: acantilados, calas, barrancos, llanuras y cultivos que podrás descubrir a lomos de un caballo. Tranquilos paseos para principiantes o rutas de varios días para jinetes más experimentados.
Las diferentes rutas que ofrece la isla te permitirán descubrir el idílico paisaje del campo menorquín o la belleza inigualable de su costa. Una de las mejores maneras de recorrerla es a través del Camí de Cavalls, un histórico sendero de 185 km que da la vuelta a la isla por el litoral y que forma parte indivisible de la identidad de Menorca. Una verdadera experiencia para los amantes de la naturaleza.