Cala Blanca

Se trata de una playa de arena y piedra situada en un enclave casi virgen, con una orilla de 135 m de longitud por unos 15 de anchura. Un rincón tranquilo incluso en temporada alta, en el que podrás practicar el nudismo y nadar en aguas transparentes con fondo de rocas, arena y posidonia que vale la pena contemplar con gafas de buceo. Para superar las piedras y cantos rodados de la orilla es recomendable llevar calzado de baño, y puesto que carece de servicios, no olvides llevar agua potable y un picnic. Cala Blanca se abre entre Punta des Bancals y Cala Cranc, a los pies de la elevación de Sa Talaia, de 300 m de altitud. A tu alrededor contemplarás un paisaje virgen eminentemente mediterráneo, cubierto de matorrales y pinos. 

Para llegar desde Andratx (a 7,1 km) debes seguir la carretera hacia Camp de Mar, en la que un desvío a la derecha te indicará el acceso al Camí de Cala Blanca, que conduce hasta la playa. Los últimos 200 m, de pronunciado desnivel, deberás recorrerlos a pie con calzado adecuado. Está permitido el acceso a perros, por lo que puedes ir acompañado de tu mascota.